domingo, 7 de abril de 2013

Grito de libertad en una poesía



Recientemente, mi mujer me leía en voz alta un trozo del libro "El mundo amarillo", de Albert Espinosa (muy aconsejable) en el que se hacía referencia a una poesía de Gabriel Celaya que creo que es una de las más concisas y directas llamadas a la libertad, por contraposición a lo que vivimos, por desgracia, desde pequeños. Espero que os remueva tanto como me removió a mí:





"AUTOBIOGRAFÍA
No cojas la cuchara con la mano izquierda.
No pongas los codos en la mesa.
Dobla bien la servilleta.
Eso, para empezar

Extraiga la raíz cuadrada de tres mil trescientos trece.
¿Dónde está Tanganika? ¿Qué año nació Cervantes?
Le pondré un cero en conducta si habla con su compañero.
Eso, para seguir.

¿Le parece a Ud. correcto que un ingeniero haga versos?
La cultura es un adorno y el negocio es el negocio.
Si sigues con esa chica te cerraremos las puertas.
Eso para vivir.

No seas tan loco. Sé educado. Sé correcto.
No bebas. No fumes. No tosas. No respires.
¡Ay sí, no respires! Dar el no a todos los "no"
y descansar: Morir"

3 comentarios:

Antonio José Sáez Castillo dijo...

Genial el poema, que ya conocía, pero que conviene recordar de vez en cuando.
Por cierto, para los niños, pero también para los mayores, os recomiendo una de las, a mi juicio, mejores poetas españolas del siglo XX, Gloria Fuertes. Tiene poemas de contenido social impresionantes. Maneja la ironía de forma magistral. Única.

Gaston dijo...

Un gran poema, nos muestra la sociedad en la que vivimos.
Le tengo una pregunta (no sé sí lo ha publicado) ¿viviría alejado de esta sociedad, de poder hacerlo?.
Espero me dé su opinión, ya que se me presenta esa situación, aunque no creo que sea buena idea, creo que somos seres sociables y no podria vivir como ermitaño.

Familia de 3 hijos dijo...

Gastón:

Te respondemos a tu pregunta: cada vez nos vemos más inclinados a alejarnos de esta sociedad en muchos aspectos (sus formas de ocio, de consumo televisivo, de contaminación mental por los medios de comunicación, de consumismo y de alimentación, su sistema educativo...). E incluso nos hemos planteado (y nos planteamos una escapada con los niños a otras zonas, para que puedan vivir unos valores que, tratamos de transmitirles, pero que el día a día les desmiente en la práctica con su entorno...También nos planteamos un mayor contacto con la tierra y con la naturaleza...Ya hemos dado algunos pasos sustanciales en algunos de estos "alejamientos", pero sentimos que el alejamiento social completo, no sería nuestra opción, porque nos sentimos plenamente felices con muchos de los seres con los que interactuamos, y viviendo nuestra realidad con ellos (no la que tratan de imponernos a otros niveles).