domingo, 18 de junio de 2017

Ñoño

Es lo que tiene la escritura en familia. Debe representar estados de ánimo, sentimientos, vivencias o experiencias compartidas de forma coral. Y normalmente suele fluir más o menos esa expresión al unísono de nosotros cinco. Sólo ha habido un par de ocasiones en que no hemos llegado a publicar lo escrito, y ha sido por cuestiones del dolor que aún guardaban esas vivencias expresadas en palabras. Mejor no revivirlo.
Esta semana hemos tenido otro ejemplo, pero de diferente naturaleza. Me sentía tan conmovido tras escuchar a mi segundo hijo en su concierto de final de curso, que me dejé llevar. Era la misma sensación tras la audición de flauta de la "peque", o tras los conciertos de violín del mayor. Y escribí, escribí y escribí expresando lo que me transmitió. Quizás fue la emoción del momento. Quizás el sentir que coronábamos la cumbre de muchos esfuerzos compartidos en familia. Quizás simplemente el orgullo ante la obra maestra de un hijo, aunque lo fuera sólo para un padre o una madre. Pero tras mostrar mi borrador al clan, el dictamen familiar fue inapelable: lo que había escrito era "ñoño". Ñoño de solemnidad. No era censura. Podía publicarlo. Pero el calificativo era unánime. Abrumado ante tal fervor familiar, releí lo escrito. La verdad es que llevaban razón: era "ñoño" hasta decir "basta". Así que mejor esta semana hagamos que las palabras callen. Que hable mejor la música...



NOTA: Este post se publica, como todo lo que escribimos, de forma gratuita y en abierto tanto en nuestro Blog como en nuestro Patreon. Pero si te gusta lo que escribimos, te ayuda, te sientes en gratitud, y quieres también impulsar un mundo diferente para vivir con nosotros, puedes colaborar en nuestros proyectos solidarios colaborando con una cantidad simbólica (desde 1€/mes) en nuestro Patreon Solidario

No hay comentarios:

Publicar un comentario

No dejes de aportar, por favor, aunque sea una palabra.